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¿Qué Significa Tener el Temor del Señor?

La Palabra nos enseña que como creyentes no debemos tener un temor terrible de Dios, sino un temor reverente. Su amor para con Sus hijos es inigualable.

...¡Nada podrá separarnos del amor que Dios nos ha demostrado en Cristo Jesús, nuestro Señor!
─ Romanos 8:39

Cuando pensamos en el temor, la idea de tener miedo es por lo general nuestro primer pensamiento. La gente a menudo explica que el temor del Señor es simplemente tener un respeto o reverencia para Él.

La Biblia usa la palabra “temor” por lo menos 300 veces en referencia a Dios. Para un no creyente, el temor del Señor es temer el juicio de Dios y la muerte eterna, la cual es la separación eterna de Dios.

Pero Yo les mostraré a quién deben temer: teman a Aquél que, después de matar, tiene poder para arrojar al infierno; sí, les digo: ¡A Él, teman!
─ Lucas 12:5

Para un creyente, el temor del Señor es algo muy diferente. El temor del creyente es el reverenciar a Dios. El temor del creyente es tener reverencia hacia Dios.

Por lo cual, puesto que recibimos un reino que es inconmovible, demostremos gratitud, mediante la cual ofrezcamos a Dios un servicio aceptable con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor.
─ Hebreos 12:28-29

Este temor y reverencia es exactamente lo que significa el temor del Señor para los cristianos. Esta debe ser nuestra motivación como nos entregamos al Creador del Universo. Salmos 111:10 dice: “El principio de la sabiduría es el temor al Señor; Buen entendimiento tienen todos los que practican Sus mandamientos...”

Cómo desarrollar un temor reverencial hacia Dios

Hasta que comprendamos quien es Dios, y desarrollemos un temor reverencial hacia Él, no podremos adquirir la verdadera sabiduría. La sabiduría verdadera sólo procede del entendimiento de quién es Dios; que Él es santo, justo y soberano.

Y ahora, Israel, ¿qué requiere de ti el Señor tu Dios, sino que temas al Señor tu Dios, que andes en todos Sus caminos, que lo ames y que sirvas al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.
─ Deuteronomio 10:12

El temor del Señor es la base para que vivamos de acuerdo a Sus caminos.

Trágicamente, el pecado en cualquier dimensión, nos distanciará de Dios

A través de Jesucristo podemos acercarnos a Dios una vez más. Tener un temor bíblico de Dios incluye el entendimiento de cuánto Dios aborrece el pecado y cómo Él nos disciplina si continuamos en el mismo.

Parte de tener temor de Dios es entender que hay consecuencias por la desobediencia. Hebreos 12:5-11 describe la disciplina de Dios hacia el creyente. Aunque es hecha en amor, aún así es algo para temerse.

El temor de la disciplina de sus padres impide algunos niños de ser malos. Lo mismo debe ser verdad en nuestra relación con Dios. Debemos temer Su disciplina, y por lo tanto tratar de vivir nuestras vidas de tal manera que le agrada.

Y de generación en generación es Su misericordia para los que Le temen.
─ Lucas 1:50

En su carta a los romanos, como Pablo describe la condición humana, afirma que porque la gente no le glorificaron como Dios, aunque Él se ha revelado con claridad desde el principio, se hicieron vanos en sus razonamientos y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se volvieron necios (Romanos 1:18-22).

El temor del Señor significa tener una reverencia para Él

Los creyentes no deben “tener miedo” de Dios. No tenemos razón para tenerle miedo. Tenemos Sus promesas de que nada podrá separarnos de Su amor (Romanos 8:38-39), y de que nunca nos dejará o abandonará (Hebreos 13:5).

Los únicos que deben temer a Dios en el sentido de "tener miedo" son los que no han puesto su fe en Jesucristo. Para aquellas personas, su futuro será muy aterrador. “¡Horrenda cosa es caer en las manos del Dios vivo!” (Hebreos 10:31).

La única manera de evitar este juicio venidero es creer en Jesucristo el Hijo de Dios. El temor del Señor significa tener una reverencia para Él que tendrá un gran impacto en la manera en que vivimos nuestras vidas. Tener fe en Jesús nos dará una visión correcta de Dios.

Esto es lo que Dios dice a toda la humanidad: “El temor del Señor es la verdadera sabiduría; apartarse del mal es el verdadero entendimiento.”
─ Job 28:28