Invirtiendo En La Eternidad                       

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Cualquiera que sea tu edad, necesitas pensar cuidadosamente cómo invertir sabiamente los pocos años que el Señor te da.

La vida cristiana es activa — una dedicada a trabajar, servir, compartir y ayudar. A menudo, pensamos que ser cristiano significa simplemente ir a la iglesia cada domingo por la mañana y poner algo en la caja de ofrendas. Eso es un buen hábito, pero si esto es la suma total de tu vida cristiana, te has perdido la marca.

Hay un orden que Jesucristo puso a todos aquellos que lo siguen. Es decir, Él nos ha llamado a ir al mundo y hacer discípulos a través del bautismo y la enseñanza. Usted puede decir: "Bueno, eso se aplica sólo a los ministros y misioneros, ¿verdad?" No. Es la responsabilidad de todos los que creemos en el nombre de Jesús.

Basta con mirar a la primera palabra de Mateo 28:19. ¿Qué dice Jesús? Él dice: "¡Vayan!" En términos de hoy, Él está diciendo: "¡Levántese del sofá! ¡Apaga la televisión! ¡Cierra la computadora! ¡Levántate, mira el mundo que te rodea, y habla con alguien acerca de mí!"

Esto no es una sugerencia. Tampoco se trata de una palabra a sólo unos pocos creyentes. Si ustedes han sido salvados por la sangre de Cristo, ¡entonces Jesús te está hablando! "Sino acumulen tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban." (Mateo 6:20)

Haciendo discípulos no significa que tiene que dejar su trabajo y convertirse en un misionero de tiempo completo a una parte remota del mundo. No necesita un sermón espectacular para ministrar a otros; usted necesita simplemente un corazón dispuesto y abierto.

Examíname, oh Señor, y pruébame; escudriña mi mente y mi corazón. Porque delante de mis ojos está Tu misericordia, y en Tu verdad he andado. ─ Salmo 26:2,3

No todos en el cuerpo de Cristo tienen la misma vocación. Pero todos estamos llamados a compartir el evangelio y hacer discípulos. "Pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo venga sobre ustedes; y serán Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra." (Hechos 1:8)

Todos estamos llamados a ser desapegados de este mundo, de modo que cuando el Espíritu nos mueve a ir, no estamos demasiado atados a nuestras propias vidas aquí en la tierra. Una iglesia espiritualmente saludable está enviando equipos de creyentes para plantar iglesias, ya sea a nivel local o un país extranjero.

Una iglesia que no está haciendo esto, no está cumpliendo con la gran comisión y perdiendo en las bendiciones que provienen de construir el reino de Dios. "¿Y cómo predicarán si no son enviados? Tal como está escrito: '¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian el evangelio del bien.'" (Romanos 10:15)

Vayan, pues, y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado; y ¡recuerden Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. ─ Mateo 28:19,20

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